miércoles, 28 de julio de 2010

Noches de blanco Satén




Después de perderme en un laberinto, caigo rendida ante un cuerpo que permite ser explorado sin rincones secretos a mi sutil tacto.
Me envuelve de nuevo la tentación del placer que me persiguió antaño y me entrego, dispuesta solamente a sentir, bloqueando la razón vencida por el roce de tu piel.
Me relajo porque sé que ambos hemos coincidido en el mismo cuento sin que el azar intervenga.
Intento escribir ese poema erótico que me pidieron tus ojos pero recuerdo el fuego de una noche, que se alargaba demasiado aún a sabiendas de que desembocaría en lo inevitable.
Escuchábamos los susurros de las sábanas que nos ofrecían un lupanar privado cada vez que nuestras miradas chocaban suavemente.
Pretendo de nuevo encontrar unas palabras que suban la temperatura pero me dejo llevar cada vez que tu lengua roza la mía.
Lo cierto es que te dejaría jugar un poco más, si tú quisieras…
Permitiría que mi cuerpo se estremeciera en un sinfín de escalofríos, encadenando los gemidos que brotan de cada orgasmo que me regalas.
Te regalaría mi piel para que la embadurnaras de aceite calentando mis poros, mientras paseas las yemas de tus dedos traviesamente, esquivando el punto exacto que será la meta de tu recorrido.
Espero hasta no poder más porque sé que te gusta verme así; ardiendo, pidiendo, exigiendo…
Persigo de nuevo ese verso que te empuje a arrancarme la ropa sin freno, que te arrastre a penetrarme varias veces hasta caer exhaustos, que te haga volar mientras derramas tu jugo caliente entre mis muslos.
Entonces busco un pañuelo de seda para que vendes mis ojos.
Dejo que me ates presionando débilmente mis muñecas y tomes mi cuerpo.
Accedo a convertir cada rincón de mí en esa sensual estrofa.
Consiento que lamas mis pechos hasta notar la dureza de mis pezones.
Acepto jugar a conquistarnos eternamente, sin conseguirlo.
Te concedo saborearme a medias y alargar la partida hasta manchar, arrugar, calentar… romper estas sábanas, que ayer nos susurraron y entre las que hoy gritamos.

Cristina Serrano  (Vaivenes e insomnios) 

Ilustración: Lecturas eróticas in white satin (2010) Marino Muñoz

lunes, 12 de julio de 2010

LA ROSA DE LOS VIENTOS


"Caballeros: Hora es de montar, hora es de internarnos en nuestros montes, hora es de lamer nuestras heridas. Volveremos, y cuando volvamos seremos millones. Fuerza y Honor para todos. Gloria eterna a La Rosa de los Vientos. Hasta siempre amigos.

Juan Antonio Cebrián (1965-2007)




Work-art: Portada diseñada para un doble CD musical de este conocido programa de Radio (2004) por Marino Muñoz

CELTAS CORTOS

















A veces llega un momento en que

te haces viejo de repente
sin arrugas en la frente,
pero con ganas de morir.





Work-art: Portada utilizada para un recopilatorio de Celtas Cortos patrocinado por Cadena 100 (2003) por Marino Muñoz

SI YO FUERA DIOS, DEJARIA DE SERLO.


Si yo fuera Dios, nunca podría ser Dios
me marcharía al otro lado de la noche
cansado de mi, cansado de Dios
cansado de hacer sufrir, de vivir
y mas que nada, cansado de estar solo.


Si yo fuera Dios
y tu me pidieras mi vida
quieres saber lo que haría
fijate lo que te digo, escucha, mira
que sin dudar ni un momento
te juro por mi, te juro por Dios
que te la daría.


Noche que te vas, dame la mano, noche que te vas
noche que te vas, dame la mano, noche que te vas
noche que te vas, dame la mano, noche que te vas
noche que te vas, dame la mano, noche que te vas.

Estrofas finales de la canción "si yo fuera Dios" de Los Suaves





Work-art: Portada utilizada para el single promocional (2003) por Marino Muñoz

viernes, 2 de julio de 2010

BELLEZA FATAL


La “Belleza” es un peligroso hipnótico con serios efectos secundarios y contraindicaciones.


En el caso de ser consumida con cierta asiduidad produce dependencia, caos empírico y tristeza crónica.

Una sobredosis de esta substancia abstracta puede resultar dramáticamente letal.




Fotografia: Inevitable death of the spread winged Dave Sewell
Cont@cto